domingo, 3 de febrero de 2008

Animal farm: los cerdos nunca mueren

George Orwell, autor de la visionaria novela 1984, escribió al final de la Segunda Guerra Mundial [1939-1945] otra obra sobre la decadencia de las sociedades humanas. Animal Farm (Rebelión en la granja) es un metáfora de los regímenes totalitarios.

Tras haber luchado en las Brigadas Internacionales durante la Guerra Civil Española [1936-1939] y más tarde, del lado de los aliados en la destrucción de medio mundo, este británico socialista sintió como todas sus esperanzas de un mundo libre e igualitario se venían abajo, una vez más, con el desarrollo del Estalinismo y ecribió este pesimista alegato contra el poder y sus devotos.

Esta reflexión sobre la codicia cuenta la historia de unos animales de una granja británica que se levantan en armas contra sus amos e instauran un régimen libertario. La esperanza inicial torna en desgracia. Nacen las clases y con ellas las luchas. Los más ambiciosos se alzan con el poder, se eliminan, mienten a sus súbditos y como en todas las sociedadas humanas, acaban nadando en el fango de las miserias humanas. En fin, el día a día de nuestras vidas.

Resulta desalentador asumir que siempre se repiten los mismos ciclos en las sociedades. Resulta aterrador observar que nuestra raza se limita a la autodestrucción para la supervivencia de la especie. Resulta deplorable comprender que siempre habrá unos elementos que sustentan el sentido de su existencia en la aniquilación de la esperanza del otro.
Orwell nos presenta el poder tal y como es: simple y corrupto.

1 comentario:

lexu-jaime dijo...

"En época de mentiras, contar la verdad se convierte en un acto revolucionario" (George Orwell)