jueves, 13 de noviembre de 2008

Chabal, un nuevo ideal de belleza


Mi chico tiene una fijación especial por Chabal, el jugador de rugby de la selección francesa y de los Sale Sharks de Inglaterra. Durante estos últimos meses le ha querido incluso emular dejándose el pelo y la barba como él, pareciendo así un poco cavernícola.

Para el que no sepa nada o poco de rugby ni por supuesto de Chabal, sólo deciros que fue apodado “el hombre las cavernas” después de romperle por cuatro sitios la mandíbula a un jugador de la selección de Nueva Zelanda cuando le hacía un placaje. Claramente a Chabal no le asustan las hakas de los All Blacks (esa especie de himno tribal que cantan, gritan y bailan los neozelandeses antes de cada partido)
Y es que Chabal, ha creado una imagen de tipo duro-hombre de cromañón que funciona. Y vaya si funciona. No solamente ha conseguido una legión de fans (entre ellos Pablo) que le siguen, copian su estilo y a veces su mal carácter (no va por ti cari!), sino que las mejores marcas de moda, perfumes y maquinaria industrial! se pelean por contar con su imagen.

Lo que más me interesa de la imagen de Chabal, es que ha creado un estilo completamente diferente a los cánones de belleza que nos imponen continuamente en todas las revistas, televisiones etc. Es la palidez, delgadez y delicadeza contra la fuerza, la fortaleza y la brutalidad, todo maquillado con un fino finísimo hilo de elegancia, para que venda claro, que al final se trata de vender.

Así que aquí le tenemos en un anuncio para un perfume súper chic y caro francés. Me encanta. Nunca habría pensado ver a un rugbymen con cara de pocos amigos en imagen de un perfume. Je je.


Si buscas en Internet encontrarás un montón de imágenes de Chabal. Yo me quedo con ésta, es Chabal y su hijo…uf! Da un poco de miedo….me recuerda a “Saturno deborando a sus hijos” de Goya. ¿No os parece?

1 comentario:

lexu-jaime dijo...

Pues a mi el “estilismo” a lo Hermanos Macana no me acaba de desagradar.

Eso si, se me llevan los demonios cuando lo venden como buen un buen jugador de Rugby. Su juego a la mano es mejorable, no lee muy bien los espacios y muchas veces placa muy poco ortodoxamente, lo que supone un peligro para él y para el contrario.

Personalente prefiero, del último mundial, a Yannick Jauzion, Habana, Juan Martín Hernández, o Felipe Contepomi.