Mola Molekine

Todo el que me conoce sabe de mi obsesión con la papelería. Todo el que habla conmigo más de 30 minutos sabe que uno de mis sueños ha sido, es y será siempre, tener una papelería. Me chifla el olor de los cuadernos nuevos, de las minas de los lápices, de las tintas de plumas y rotuladores. Para mí entrar en una papelería es como decía ese "gran artista" llamado Enrique Iglesias "casi una experiencia religiosa".
Como amante de la papelería tengo varios "must" que creo no debería faltar en ningún bolsillo y/o mochila que se precie.
Los cuadernillos Moleskine.
¿Qué tienen de especial? Pues a primera vista, nada. En el mercado encuentras cuadernos muy parecidos o incluso iguales. Pero si te gusta la papelería (no hace falta hacer un máster, con pasar la tarde en un Carlin te vale) sabrás que un Moleskine es único.
Esas tapas duras que te permiten escribir sin apoyarte, esa gomita que sujeta todos los papelitos y notitas que dejes dentro del cuaderno. La moleskine es "un contenedor de ideas" fliplándonos un poco. La verdad es que la marca ha sabido explotar muy bien el hecho de que personajes conocidos del arte y la cultura como Luís Sepúlveda o Bruce Chatwin las han utilizado.
En su portada negra de tela moleskin (de ahí viene el nombre), un marcador de colores reza "el legendario cuaderno de Van Gogh, Picasso y Matisse". Aunque según el Wikipedia esto no está demostrado, cuela, y ¡cómo!. Bucea un poco en Internet y comprobarás que todo artista que se precie usa una Moleskine.
La imagen que adjunto es lo que ha hecho un artista en su Moleskine . En su blog “Le blog de Pierre”. http://pmosnier.free.fr/dotclear/index.php?2007/11, podrás ver todo lo que inspira una Moleskine.